
Pimientos para todos: dulces, picantes, a la parrilla o rellenos
Pimientos – Color y sabor en la mesa
Originarios de América y difundidos en Europa tras los intercambios postcolombinos, los pimientos son hoy indispensables en la cocina mediterránea. Existen muchas variedades, divididas principalmente en dulces y picantes. Los dulces — rojos, amarillos o verdes — son ideales para asar, grillar o añadir a ensaladas. Los picantes aportan intensidad a salsas y platos especiados. En la cocina, los pimientos se pueden rellenar, convertir en cremas para pasta o saltear como guarnición. Su versatilidad los hace esenciales en muchas cocinas regionales. En Italia destacan en recetas clásicas como la peperonata, los pimientos rellenos al estilo piamontés y la pasta con crema de pimientos.
Los beneficios de los pimientos
Los pimientos son ricos en nutrientes saludables. Aportan gran cantidad de vitamina C, vitamina A (en forma de betacaroteno) y antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, que protegen la salud ocular. La capsaicina de los pimientos picantes tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Gracias a su alto contenido de agua (alrededor del 92 %), favorecen la hidratación, especialmente en verano. Además, son bajos en calorías y aptos para dietas hipocalóricas.
Recetas de pasta con pimientos
Una de las recetas más sencillas y sabrosas con pimientos es la pasta con crema de pimientos. Asa 2 o 3 pimientos rojos en el horno, pélalos y tritúralos con aceite de oliva virgen extra, albahaca fresca, ajo y queso pecorino rallado hasta obtener una crema suave. Cocina 280 g de penne al dente, escúrrelos y mézclalos con la crema. Sirve con más pecorino y hojas frescas de albahaca. Ideal para un almuerzo veraniego ligero y lleno de sabor.