Tagliatelle con espinacas al huevo almendradas

Pelar el aguacate, que tiene que ser perfectamente maduro, es decir suave cuando se toca; cortarlo en 2 partes, quitar el hueso, pelarlo, cortar la pulpa en cubitos y colocarlos en una tarrina; mojarlos con el zumo de limón para que no ennegrezcan. En una olla pequeña hervir el agua, sancochar apenas las almendras: tomando una entre pulgar y índice y apretando un poco sobre la piel saldrá la almendra limpia; pelarlas todas, secarlas bien y picarlas con los piñones. Echar en una olla abundante agua, salarla, y cuando hierve echar la pasta: cocer al dente. Mientras tanto, en una olla pequeña derretir la mantequilla, aliñar con calor moderado el picado de almendras y piñones, luego añadir un par de cucharas del agua de cocción de la pasta, mezclar con cuidado y quitar del hornillo. Colar la pasta al dente, echarla en la sopera caliente, condimentarla con el guiso preparado y el aguacate secado, mezclar y servir inmediatamente.